1910 - 1964
Gaston Chaissac (Avallon, 1910 – La Roche-sur-Yon, 1964) produjo una obra extraordinaria, imaginativa y deliberadamente alejada de los grandes movimientos artísticos de la época pero que, a pesar de este aislamiento, acabó dejando una perdurable huella, personal en unos casos, artística en otros, en personalidades tan relevantes del mundo del arte como Otto Freundlich, Albert Gleizes, Auguste Herbin o el mismo Jean Dubuffet. Su capacidad de mantenerse en los a menudo fructíferos umbrales entre estilos y disciplinas le convierte en uno de los artistas más originales de su tiempo.